AUTOR: Kenia Miranda
Independientemente de cómo hayas escuchado o leído por primera vez sobre la Ley de la Atracción, algo llamó tu atención; por curiosidad, pudieron decirte que era milagrosa, que te cumpliría tus deseos, que sólo con pedir te llegaban muchas cosas a tu vida, en fin, miles de comentarios y lecturas.
Como quiera que haya sido...¡YA ESTÁS AQUÍ!
Sí, ya te has informado; viendo algún documental, película, vídeo o leído algún libro, para así tener noción sobre cómo funciona La Ley de la atracción.
Te podrás preguntar: ¿Por dónde empiezo? ¿Qué hago primero? ¿Estaré bien?... En el vídeo vi esto, pero vi que lo dicen de otra manera y otras interrogantes más. El libro decía que debía hacer tal cosa, ¿Será así?, ¿Lo estaré haciendo bien?, etc. ¿Cierto, o no?.
Ahora, déjame decirte que no hay un orden establecido para realizar las diferentes prácticas que se deben ejercer en la aplicación de ésta Ley.
Primeramente debes estar consciente que tienes que hacer un cambio relevante en tu FORMA DE PENSAR, en ir potenciando tus pensamientos, desde ahí partimos.
Es lógico que no vas a cambiar de la noche a la mañana, pero sí debes tener presente, que si aún no tienes resultados, es por el siguiente motivo: Para comenzar a utilizar la Ley de la atracción, se requiere desarrollar en tí el AGRADECIMIENTO, conforme vas identificando todo lo bello, bueno y valioso que hay ya a tu alrededor, dentro de ti. Tu energía se irá incrementando a tu favor, en cambio cuando es al contrario, sólo hay pesimismo, dudas, quejas ,lamentos e inseguridad y manifiestas esa baja energía, la atraes obteniendo más de lo mismo.
La Ley te obedece según la energía que tú generes, que tú creas, consciente o inconscientemente, la que tú le envías.
No es La ley la que no funciona.
Así que te invito que desde ya realices una lista de todas las cosas que tienes como: Vida, salud, un techo, familia, los sentidos, etc. Cada uno de nosotros, somos poseedores de una fortuna invaluable que ninguna cantidad puede comprar.
¡Disfruta tu riqueza! Conforme va aumentando tu estado de ánimo, empiezas a vivir más ligero, dando lugar a un estado tranquilo, donde ves las cosas más positivas, creando una sensación de paz. No te asustes si de repente brota en tu rostro una sonrisa por algo bueno que reconozcas en tí y sientas alegría, una gran satisfacción. No estás loco, sólo estás ¡Vibrando en armonía!
Si ya lograste emplear este punto fundamental, entonces sí ya estás listo para dar el siguiente paso.
Tú decidirás cuál será, porque nadie más que tú sabe que es lo que deseas o cuáles son tus prioridades.
Si quieres decretar, hazlo, si optas por afirmar también es muy revitalizador, si elaboras materiales visuales, tableros, frases o decretos,¡Excelente!. O si vas directo a la visualización ¡Estupendo! Todas estas acciones te rendirán frutos, siempre y cuando des las GRACIAS por algo que hay en tí o en tu vida, que sea un sentimiento constante y sincero. Porque de esa manera estarás proyectando lo mejor de tí, despertando todo ese cúmulo de cualidades que tienes y eres capaz de observar en tu contexto. Enfócate sólo en tí, en tus acciones. Sé tu : Propio juez, Mejor animador, Amigo, Gran supervisor de tu actitud, Entrenador y evaluador de esta carrera que haz emprendido, Potente conciliador entre lo que eras y el maravilloso ser humano en el que puedes transformarte.
La vida te da esa oportunidad. YA LA TIENES. ¡APROVÉCHALA!
