Los pretextos en la Ley de la Atracción
AUTOR: Kenita Donoso |
Partamos de la base que la Ley de la atracción es una Ley Universal que dice que iguales se atraen o que lo semejante atrae a lo semejante.
No obstante, hay muchísimas personas que :
- Responsabilizan a un tercero de lo que les ocurre.
- Actúan de determinada manera porque tienen cerca a una persona tóxica.
- Lo han pasado muy mal en su vida.
- Tuvieron una infancia difícil.
- La familia los hace actuar de esa forma.
- Su trabajo es terrible.
- Nadie los entiende.
En fin, mil y una excusas para justificar su manera de actuar, hablar, elegir, sentir y obrar. Cada uno de nosotros tiene una historia de vida muy distinta.
Y es gracias a esa "historia", que nos hemos convertido en la persona que hoy somos, que Tú eres hoy.
Es tan simple como ser muy honesto contigo y asumir lo que ocurre en tu vida y más aún, en lo que estás eligiendo hacer con ella.
Es cierto que a veces podemos estar rodeados de personas que:
- Hablan muy alto o gritan.
- Mienten o faltan a la verdad.
- Insultan al otro... y más.
Sin embargo, es tú "opción" ponerte también a gritar, mentir, insultar... Recuerda, es opción, elección, no es "peste", es decir, no se pega.
¿Qué tomaría que te hicieras responsable por tus elecciones y acciones? ¿Será que es más simple responsabilizar al otro de nuestro actuar?. Pues de esta manera, no sería tu responsabilidad, pues es el "otro" quien te provoca o induce.
Es muy común escuchar o leer a personas, escudarse en el otro, para justificar una acción, diciendo:
- Yo lo hice porque Juan lo hizo.
- Como todos lo hacen, yo lo hago.
- Siempre lo hice y nadie me dijo nada.
- Nadie me está mirando, así que no importa.
- Total, no le hago daño a nadie.
- Porque a tal persona le resulta así, yo le imito, sabiendo que no es correcto.
- Es que no tengo dinero.
- Sólo fue una vez.
Todas estas son excusas, justificaciones de una Persona que carece de madurez y no se responsabiliza de su Ser, sabiendo que lo que está diciendo, accionando, pensando, sintiendo o escribiendo sólo depende de una Persona y esa persona eres Tú.
El minuto en que tomas conciencia de tus palabras, acciones, decisiones y elecciones, sólo ahí comienzas a actuar con un Propósito.
¿Cuál es el tuyo?... ¿Ya lo sabes? Pues entonces enfócate en ello y no pongas excusas, no te justifiques en tu hij@, pareja, esposa, marido, novio, novia, familia, jefe, vecino, en fín, en el otro... ¿Por qué? Porque el otro es otro, no eres tú, muy parecidos o muy distintos, pero finalmente otro. Por ello, no esperes, ni pienses que va a elegir, actuar o sentir como tú.
Es por esto que en la Ley de la atracción es tan importante mantenerse ENFOCADO.
¿Qué deseas atraer a tu vida? ¿Cómo quieres que sea esa vida? ¿Cuál es tu deseo? ¿Qué anhelos tienes? ¿Cuáles son tus metas? Entonces, no te preocupes de lo que hace el otro, ocúpate de Tí. Recuerda que la Ley de la atracción funciona de manera PERSONAL.
Tú eres la fuente creadora de tu vida y de los sucesos que ocurren en ella. Si eliges los pretextos, las excusas, estar desenfocado y pendiente del otro, pues... Entonces recuerda "Lo semejante atrae a lo semejante"...
¿Qué decides?
AUTORA: Kenita Donoso
Foto Principal: Patrick Tomasso